Desfiladero del Tigre Saltando en Lijiang

A cerca de cien kilómetros al nor occidente de la ciudad antigua de Lijiang, ubicado entre la Montaña nevada Dragón de Jade o Yulong Xueshan y la Montaña Nevada Haba o Haba Xueshan se encuentra el desfiladero del Tigre Saltando o Hutiao, que se cree que es el desfiladero más profundo tanto de China como en el planeta. Desde lo alto de este lugar se pueden ver los lados empinados de la montaña hacia el río Arenas Doradas o Jingsha con sus espumosos dieciocho rápidos a más de doscientos metros abajo.

Naturalmente este desfiladero está dividido en tres secciones, la primera, que es la más estrecha y más alta, es la desembocadura del rápido río Jingsha. En la mitad de esta desembocadura se encuentra una gran roca que está ubicada en la sección más estrecha del desfiladero, con sólo treinta metros de ancho. Una leyenda antigua asegura que un tigre usó esta roca como un paso para así poder saltar de un lado del desfiladero al otro, y por eso tiene ese nombre.

A medida que el río entra la sección media, cae otros cien metros y su ritmo de corriente aumenta a una gran velocidad. Aquí las ruidosas y rápidas aguas se estrellan contra grandes y afiladas piedras y vuelven al río formando sendos remolinos. Aquí los turistas creen que el espectáculo no se puede volver más emocionante, pero si sucede cuando llegan a la tercera y más baja sección que es conocida por ser la más salvaje de todas.

Las colinas que miran esta sección son incluso más empinadas y mucho más peligrosas. Aquí, el río se tuerce y voltea y surge más adelante creando grandes olas y arrojando espuma a medida que colisiona con los lados de la montaña. Esta es una vista que inspira un sentido de aventura y satisface los deseos de ver un escenario magnifico.

El desfiladero se extiende por cerca de quince kilómetros y también le brinda a los visitantes la oportunidad de ir en balsa y flotar pacíficamente en sus secciones largas y tranquilas, para aquellos que quieran sólo flotar gentilmente, y aventuras emocionantes en balsa para los más experimentados.

Foto 1 Vía: Peter Morgan