Linfen, la ciudad más contaminada del mundo
El desarrollo económico de un país está pensado en función de la población, sin embargo en ocasiones tal desarrollo está originalmente dirigido a obtener más y más ganancias sin pensar en las consecuencias. Un caso extremadamente se ubica en China, en la provincia norteña de Shanxi, allí se encuentra Linfen, una ciudad que es considerada la ciudad más contaminada del mundo debido a las emanaciones de las minas de carbón.
Linfen es la zona minera más importante de China, cuenta con 230,000 habitantes potencialmente enfermos. Además de ser la ciudad más contaminada del mundo es una de las que infringe con las leyes medioambientales. Los investigadores tratan a Linden como la peor ciudad donde vivir pues es difícil distinguir a más de 100 metros de distancia algún edificio de la zona, sólo en 20 días del año aparece el sol, de 60 años es la esperanza de vida y debido a las enfermedades por la contaminación 20% de las muertes se producen en los hospitales.
El ciudadano de Linden tiene que enfrentarse diariamente a su ambiente insostenible, a causa de la explotación del carbón la población está en contacto a través de aire, tierra y agua con el dióxido de sulfuro, monóxido de carbono, arsénico, plomo y demás óxidos del nitrógeno. Respirar el aire de esta ciudad equivale a fumar 30 cajetillas de cigarro, es por ello que existe 30% de tasa de mortalidad en esta parte del país en comparación del territorio total.
En Linden se encuentra la peor calidad de aire, resulta una carga pesada para el habitante de esta ciudad. Las enfermedades son comunes, enfermedades respiratorias y principalmente, cáncer al pulmón. Los casos de neumonía, bronquitis, envenenamiento por plomo afectan en mayor cantidad a los niños. Sin embargo también afecta la Arsenicosis, enfermedad química ambiental cuyas razones de aparición se deben a ingerir elevadas concentraciones de arsénico mediante el agua y si sucede una exposición crónica produce lesiones en la piel, enfermedades del sistema vascular periférico, artritis, hipertensión y alto riesgo de cáncer.
Tanto aire, tierra y agua se encuentran afectados; en la tierra es casi imposible que crezca vegetación; en el agua los estudios demuestran que el nivel de inseguridad es del 52%. Ante esta problemática las autoridades tiene que dar la cara para poner fin a la vida de poca calidad de los habitantes de Linfen. Esta ciudad es totalmente un lamentable desastre ecológico.
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